Usos terapéuticos del Cannabis y del CBD

En esta guía describimos con más detalle los usos terapéuticos del cannabis y el funcionamiento, o cómo actúan, el CBD y otros cannabinoides en las diferentes enfermedades en las que han demostrado potencial terapéutico.

¿Por qué se emplea el CBD en medicina?

El sistema endocannabinoide (SEC) es un grupo de receptores cannabinoides (CB) endógenos —receptores endocannabinoides—, localizados en el cerebro y los sistemas nerviosos central y periférico. El SEC está involucrado en diversos procesos fisiológicos, a saber:

• Sensación y control del dolor
• Humor
• Sistema inmunitario
• Regulación del apetito
• Mediación de los efectos psicoactivos del cannabis

El cannabidiol (CBD) actúa mediando receptores 5-HT_1A, teniendo baja afinidad con los receptores CB. Al no actuar a través de los receptores cannabinoides de tipo 1, o receptores CB₁, responsables de la psicoactividad, no tiene los efectos psicoactivos o psicotrópicos propios del tetrahidrocannabinol (THC) —principal constituyente psicoactivo del cannabis—. Además, el CBD modera dichos efectos del THC cuando ambos compuestos se administran en conjunto.

El CBD, por lo tanto, no intoxica o droga ni produce ansiedad, taquicardia u otros efectos secundarios típicos del THC. Sin embargo, posee propiedades terapéuticas significativas, que se potencian al usarse junto con el THC —y con otros metabolitos secundarios de la planta—. Lo que hace que ofrezca beneficios en el tratamiento de una gran diversidad de patologías o enfermedades, como las que veremos a continuación.

¿Para qué enfermedades está recomendado?

Existe evidencia de beneficios en las siguientes enfermedades:

• Dolor crónico
• Fibromialgia
• Artritis y artrosis
• Estrés y ansiedad
• Depresión
• Insomnio
• Cáncer
• VIH/sida
• Alzhéimer
• Párkinson y otros trastornos del movimiento
• Esclerosis múltiple
• Epilepsia y epilepsia refractaria
• Esquizofrenia
• Diabetes
• Enfermedades inflamatorias intestinales
• Enfermedades inflamatorias cutáneas
• Glaucoma

En la página Uso del CBD [enlazar] encontrarás una pequeña reseña o descripción de cada enfermedad, así como los principales efectos de la terapia con cannabis —CBD y otros cannabinoides— en su tratamiento.

Usos recomendados

Comprobemos con qué finalidad se usan y cómo actúan el cannabis, los cannabinoides y sus derivados en cada una de las enfermedades, basándonos en los estudios y ensayos clínicos publicados.

Dolor crónico

Diversos estudios han demostrado una respuesta analgésica y un alivio del dolor neuropático crónico mediante el cannabis fumado, con efectos psicoactivos bien tolerados y resultados comparables a los fármacos orales utilizados para el mismo fin (estudio, estudio).

Cannabinoides y opioides comparten varias propiedades farmacológicas, y pueden actuar de forma sinérgica. El cannabis aumenta el efecto analgésico del opioide, por lo que la combinación «puede permitir el tratamiento con opioides en dosis más bajas con menos efectos secundarios», tal y como se indica en este artículo.

Más información sobre el uso del cannabis para el dolor crónico.

Fibromialgia

El uso terapéutico del cannabis —fumado, oral o combinado— se asocia con beneficios en dolor crónico, dolor neuropático, rigidez, entre otros síntomas de la fibromialgia (estudio). El cannabis logra mejorar, así, la calidad de vida del paciente.

En este ensayo Nabilone (Nabilona, nombre comercial Cesamet®, análogo sintético del THC comercializado como medicamento), se muestra como «una opción de tratamiento beneficiosa y bien tolerada para los pacientes con fibromialgia, con beneficios significativos en el alivio del dolor y la mejora funcional».

Más información sobre el uso del cannabis para la fibromialgia.

Artritis y artrosis

Los fármacos a base de cannabis tienen una serie de indicaciones terapéuticas, que incluyen efectos antiinflamatorios y analgésicos.

«Apuntar» a los receptores CB puede tener potencial farmacológico para tratar la inflamación y el dolor crónico por artritis reumatoide y artrosis u osteoartritis (OA), al inhibir la sensibilización central (estudio, estudio). La presente revisión de estudios resume los resultados que respaldan el valor terapéutico de los cannabinoides para tratar la OA.

Más información sobre el uso del cannabis para la artritis.

Estrés y ansiedad

La evidencia preclínica y los hallazgos experimentales en humanos demuestran la eficacia del cannabidiol y los cannabinoides para tratar los trastornos neuropsiquiátricos relacionados con el estrés (artículo). También los trastornos de ansiedad, incluidos el trastorno de ansiedad generalizada (TAG), trastorno de ansiedad social (TAS), trastorno de pánico (TP), trastorno por estrés postraumático (TEPT) y trastorno obsesivo-compulsivo (TOC).

El CBD parece reducir las conductas de ansiedad, según se informa en esta revisión, con «efectos sedantes mínimos y un excelente perfil de seguridad».

Más información sobre el uso del cannabis para el estrés y la ansiedad.

Depresión

Varias líneas de investigación sugieren que los medicamentos cannabinoides tienen potencial terapéutico para tratar la depresión (minirevisión).

El tratamiento con estos fármacos produce efectos semejantes a los tratamientos antidepresivos actuales, como muestra este estudio: «El CBD induce efectos similares a los antidepresivos […] probablemente fueron mediados por la activación de los receptores 5-HT_1A».

Insomnio

Cannabinoides sintéticos como la Nabilona y el Dronabinol (nombre comercial Marinol® y Syndros®, resina oleosa en cápsulas) pueden ser beneficiosos a corto plazo para la apnea del sueño (revisión de la literatura sobre cannabis y sueño).

El CBD se muestra prometedor para el trastorno de conducta del sueño REM y la somnolencia diurna; la Nabilona, para reducir las pesadillas asociadas al trastorno por estrés postraumático y mejorar el sueño en pacientes con dolor crónico (estudio).

Más información sobre el uso del cannabis para el insomnio.

Cáncer

Los componentes activos del cannabis —cannabinoides y sus derivados— pueden reducir el crecimiento y la progresión tumoral, además de tener efectos paliativos sobre síntomas asociados a la enfermedad. El THC desencadena la muerte de células de cáncer mediada por autofagia, que, aunque es considerado principalmente un proceso de supervivencia celular, también puede conducir a la muerte celular (estudio).

Se estudia el uso de cannabinoides como agentes anticancerígenos en glioma (tumor cerebral), melanoma y carcinoma cutáneos (piel), de mama, de páncreas, de hígado, de próstata, entre otros.

VIH/sida

El manejo de los síntomas, efectos secundarios y complicaciones comunes en las infecciones por VIH está bastante extendido entre los pacientes con la enfermedad. Los usuarios de cannabis reportan beneficios en mejora del apetito, dolor muscular, náuseas, ansiedad, dolor nervioso, depresión y parestesia (sensación anormal de entumecimiento y hormigueo en manos, pies, brazos y piernas).

Los datos del presente estudio sugieren que para los fumadores de marihuana con VIH/sida, tanto esta como el Dronabinol son bien tolerados e incrementan la ingesta de alimentos.

Alzhéimer

Los estudios, tanto in vitro como in vivo, parecen corroborar que los receptores CB son importantes en la patología de la enfermedad de Alzheimer (EA). Los cannabinoides son agentes neuroprotectores, con éxito para prevenir el proceso neurodegenerativo (estudio).

El CBD muestra propiedades antiinflamatorias en modelos animales de neuroinflamación y ejerce acción neuroprotectora en modelos de neurotoxicidad (estudio). Lo que sugiere potencial para mitigar el daño cerebral o neuronal y retrasar el curso de la EA.

Párkinson y otros trastornos del movimiento

Los cannabinoides tienen valor terapéutico para reducir la discinesia (movimientos musculares anormales e involuntarios) en la enfermedad de Parkinson, así como algunas formas de temblor y distonía (estudio).

También para el tratamiento de los tics en el síndrome de Tourette, y podrían ser útiles para tratar la corea en la enfermedad de Huntington (EH). En este ensayo clínico con Sativex® (extracto botánico con CBD y THC) se indica que el medicamento es seguro y bien tolerado en pacientes con EH, con la dosis prescrita y durante un período de 12 semanas.

Esclerosis múltiple

Los cannabinoides proporcionan una nueva forma de terapia de la espasticidad, un síntoma frecuente en la esclerosis múltiple (EM) con una discapacidad significativa asociada y un deterioro de la calidad de vida.

Ensayos han demostrado la eficacia de la asociación THC más CBD (1:1) en espray oromucosal (administración vía mucosa de las encías y mejillas) para reducir la espasticidad en pacientes con EM resistentes a otras terapias, sin problemas de tolerancia o adicción (análisis). «Causa un efecto específico en los receptores CB(1) y CB(2), minimizando las acciones tradicionales de cannabis psicotrópico», recoge esta revisión.

Epilepsia y epilepsia refractaria

El cannabidiol influye en la plasticidad sináptica y facilita la neurogénesis (revisión).

Conforme a los hallazgos de los ensayos controlados aleatorios, puede reducir la frecuencia de las convulsiones en adultos jóvenes y niños con epilepsia severa, de inicio en la infancia e intratable (resistente al tratamiento). En este ensayo concreto se administró CBD por vía oral a pacientes de entre 1 y 30 años en dosis máximas de 25 mg/kg o 50 mg/kg por día, mostrando un perfil de seguridad adecuado.

Esquizofrenia

Se ha propuesto al SEC endógeno como un posible objetivo terapéutico para el tratamiento de esta enfermedad (minirevisión).

El cannabidiol puede ser eficaz para tratar la esquizofrenia aguda. Según este metanálisis, «los pacientes con esquizofrenia o FEP (primer episodio de psicosis) con antecedentes de consumo de cannabis tienen un funcionamiento neuropsicológico superior en comparación con los pacientes no consumidores».

Diabetes

El consumo de cannabis, o marihuana, se asocia con una menor prevalencia de diabetes mellitus (DM). Aunque se necesitan más estudios que muestren el efecto directo de la sustancia en la DM (estudio).

Los hallazgos de este estudio destacaron los efectos beneficiosos del extracto de Cannabis sativa para aliviar el dolor neuropático diabético, «posiblemente a través de una fuerte actividad antioxidante y una acción específica sobre el factor de crecimiento nervioso» (estudio).

Enfermedades inflamatorias intestinales

Varias investigaciones sugieren posibles roles del SEC en la inflamación gastrointestinal. «La vía de señalización de los endocannabinoides, a través del receptor CB₂, puede reducir la inflamación asociada a la colitis», concluye el presente estudio.

Lo que convierte al receptor cannabinoide de tipo 2 en un objetivo potencial para tratar los trastornos de la motilidad asociados con la inflamación intestinal y las enfermedades inflamatorias del intestino (estudio).

Enfermedades inflamatorias cutánea

Se investiga el papel de los cannabinoides en dermatología, como agentes para el tratamiento de enfermedades inflamatorias de la piel.

JWH-133 es un cannabinoide sintético con actividad antiangiogénica (reduce la formación de nuevos vasos sanguíneos) y antiinflamatoria; es capaz de inhibir citocinas —HIF-1 α, VEGF, MMP, bFGF, IL-8 e IL-17, entre otras—, in vitro e in vivo. Pudiendo, pues, usarse para tratar la psoriasis «debido a su potencial para suprimir los dos pasos principales de la patogénesis psoriásica (angiogénesis e inflamación)», tal y como se señala en este estudio.

Glaucoma

Los cannabinoides muestran potencial en enfermedades de la retina como el glaucoma y la retinopatía diabética. Algunos actúan como «fármacos ideales» en el manejo del glaucoma, al reducir la presión intraocular, tener carácter neuroprotector sobre las células de la retina y por la buena tolerancia tras su aplicación tópica (revisión).

Los resultados de este otro estudio «demuestran la expresión y regulación de los receptores CB1 y CB2 y FAAH (amida hidrolasa de ácidos grasos) en células RPE (pigmento retiniano epitelial) humanas». Lo que garantiza, asimismo, futuras estrategias terapéuticas en la degeneración macular asociada a la edad.

[IMPORTANTE]

Recuerda que el CBD no es un tratamiento, ni debe emplearse como tal, ni como un remedio, ni una cura para estas enfermedades. El CBD te ayuda a llevar mejor tu día a día, a que los síntomas sean más suaves, a mejorar la calidad de vida en muchos casos, pero no es la cura demostrada de ninguna de estas enfermedades. Siempre es importante y necesario consultarlo con tu médico.

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